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NACIONAL

Trabajadores de la CC crean sindicato y acusan vulneración: ¿Y los jefes que tanto hablan de los DD.HH.?

Por: Equipo “Cápsula Informativa”

La primera agrupación de trabajadores que se oficializaron acusaron sueldos impagos, falta de espacios para trabajar, e incluso, falta de contratos.

Un grupo de trabajadores de la Convención Constitucional anunció la creación del primer sindicato de funcionarios del organismo que está encargado de redactar una nueva Constitución para el país. El primer sindicato, dentro de un grupo en el que tanto se habla de los derechos humanos y de respetar las garantías individuales, resulta paradójico.

Una muestra de que dentro de la CC el show continúa. Ya no almuerzan en las escaleras del ex Congreso, para llamar la atención de los medios y aparecer en las portadas, tampoco algunos payasos han vuelto a ir disfrazados. Lo que se mantiene es la práctica tan vulgar de atacarse a viva voz, a través de los micrófonos (con lo que demuestran muchos su falta de educación). ¡Un circo pobre, rasca!

Ahora, lo de la creación del sindicato, confirma que estos 155 constituyentes (con excepciones de algunos que sí son profesionales) no es más que una suerte de jardín infantil variopinta, con ignorantes en múltiples áreas, pero que están ganando $2.500.000 mensuales y las asignaciones. Y algunos contrataron asesores, al familión completo para darles “pega”.

Colusión

El sindicato

El nuevo Sindicato plurinacional de trabajadoras y trabajadores de la Convención Constitucional se conformó el jueves y es presidido por Úrsula Eggers, quien está acompañada por Francisco Ríos en la vicepresidencia.

A través de un comunicado, en el que oficializaron la conformación del sindicato, el grupo de trabajadores denunció una serie de vulneraciones a sus derechos laborales por parte de la Secretaría General de la Presidencia (Segpres), como falta de contratos y sueldos impagos de hasta tres meses.

“Ante las múltiples vulneraciones de derechos laborales como la inexistencia de contratos, sueldo impagos con hasta tres meses de retraso, falta de espacios para trabajar y alimentarse, jornadas laborales de lunes a domingo y de doce horas o más, es que nos unimos y organizamos con el objetivo de obtener condiciones dignas de trabajos para todas, todos y todes quienes hacemos posible el proceso constituyente”, dice el documento.

“Reivindicamos que el nuevo Chile se escriba sobre el respeto irrestricto a la dignidad de las personas y los pueblos; sin perpetuar patrones abusivos hacia la clase trabajadora”, agrega.