SALUD

Nutrición infanto-juvenil: Bulling por falta o sobre peso predomina en niños y jóvenes

Por: Equipo “Cápsula Informativa”

¿Cuándo fue la última vez que le hiciste una evaluación nutricional a tu hija/hijo? ¿Sabes si está en el peso correcto y con la alimentación adecuada de acuerdo a su sexo, edad y actividades que realiza?

Según las últimas cifras del Ministerio de Salud, cerca del 70% de la población mayor de 15 años sufre de obesidad y aunque esa estadísticas baja a 30% en niños, los números son impactantes.

Además, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), cerca de 80% de las enfermedades asociadas a problemas cardiovasculares podrían evitarse si se previene la obesidad, se cambian los hábitos sedentarios y se trabaja en una alimentación saludable desde pequeños.

En esa misma línea de prevención, la Clínica de Salud y Nutrición Vie et Santé, creó un programa destinado a niños y adolescentes para que aprendan y desarrollen hábitos alimenticios saludables para su crecimiento.

En la primera cita el niño (desde 10 años) o el adolescente (hasta 18 años), entrega todos sus antecedentes médicos previos y alimenticios, es decir, si sufre de algún grado de ansiedad, si come a deshoras, qué le gusta comer o picotear ¿dulce o salado?

Luego se efectúa la evaluación corporal: peso, talla, medición del IMC, diagnóstico nutricional, y de acuerdo a los resultados se les aplica el programa correcto a su necesidad que, además, incluye apoyo psicológico y sesiones de ejercicios a cargo de kinesiólogos.

La Nutricionista de Clínica Vie et Santé, Paula Charpentier, explica que los niños son traídos, principalmente, por sus padres, pero que, en caso de los jóvenes, ellos llegan por su voluntad, porque sufren bullyng por su sobre o falta de peso. 

La especialista ha detectado que la mayoría de los pacientes infantiles o jóvenes, “picotean” o comen a deshoras, porque pasan mucho tiempo solos desde que salen del colegio hasta la hora que llegan sus padres del trabajo. 

Indica, en todo caso, hay esperanza, ya que, la mayoría de los jóvenes que cumple el plan, en un 90% a través del tiempo, se mantienen, por lo que se estima serán adultos saludables. A diferencia de los adultos, que son más propensos a subir de peso tras tratamientos nutricionales.