Columna: Incendios forestales: la nueva improvisación del Gobierno de Boric
Por: César Cifuentes
Durante varios días, en los canales de televisión y, particularmente, como “bombo en fiesta” se habló de la ola de calor que afectaría a gran parte del país. No era una noticia más, sino un antecedente importante a considerar por parte del Gobierno para tomar precauciones, adoptar medidas concretas y, sobre todo anticiparse. Hacer las cosas mal y tarde, trae consecuencias que hasta puede implicar la ocurrencia de víctimas fatales.
Más de una semana para que el gobierno, finalmente, entendiera que tenía que aplicar Toque de Queda en las zonas siniestradas por los incendios forestales. Primero, para que exista control es los desplazamientos, se facilite el trabajo de los voluntarios y se evite que los delincuentes roben las pocas especies que les quedaron a los afectados.
Una semana les costó entender la gravedad de la situación y el hecho de que varios vecinos no querían abandonar sus casas, precisamente, para que no les robaran.
¡Una miopía evidente!
Hasta que la razón pudo más y el gobierno de Boric y sus amigos de la izquierda de caviar, de esa izquierda acomodada, que aprovecha los beneficios del modelo capitalista que, se supone tanto odian, tuvieron que ceder y permitir que los militares salgan a la calle y tomen el control. ¡Se tuvieron que guardar el ego, sus sesgadas ideologías y su rabia al cederle el poder a los militares! Así es la vida, mejor dicho, ¡las vueltas de la vida!
La restricción de la circulación, que entrará en vigor a la medianoche del viernes y regirá hasta las 05:00 horas, afecta a 28 municipios en tres regiones en las que Boric declaró el estado de catástrofe: Biobío, Ñuble y La Araucanía.
El presidente, dijo que tenemos que hacer todo lo que esté a nuestro alcance para entregar las facilidades a brigadistas y bomberos y, por otro lado, la seguridad a las familias, de que no las vamos a dejar solas.
Hizo un llamado a quienes estarían provocando los incendios: “A quien quiera que esté jugando con fuego en esto, la ley lo va a alcanzar, piensen en la gente que está trabajando y arriesgando su vida por todos nosotros”.
Boric agregó que, de ser necesario, obligará a todos los habitantes a que entreguen sus herramientas, maquinarias y agua a los equipos de emergencia, y de no hacerlo, se les serán requisadas.
Esto obedece a la denuncia de un piloto de combate contra incendios, sobre habitantes que no permitían la extracción de agua de sus piscinas para aplacar la emergencia.
Hasta ahora, las llamas dejan al menos 24 muertos y unos 2.196 heridos, han arrasado más de 343.000 hectáreas en las regiones de Ñuble, Biobío, La Araucanía y Maule.
La ola de incendios forestales ha destruido completamente 1.205 viviendas y dejado sin hogar a 5.570 personas, según el balance oficial.
Hay que señalar que, con el Toque de Queda, sólo se permitirá la circulación de vehículos de emergencia, policiales, Bomberos, Brigadistas Forestales, funcionarios de salud, Gendarmería y de servicios públicos esenciales y medios de comunicación acreditados.
Uno se pregunta, ¿por qué haber esperado una semana para adoptar antes esta medida y se habrían evitado más muertes e incendios? Una vez más, la gestión lenta, tarde de Boric, está perjudicando y afectando a los chilenos.