Crítica de cine: RAMBO – LAST BLOOD
Rambo : Last Blood (2019)
Dirección : Adrian Grunberg
Reparto : Sylvester Stallone, Paz Vega, Adriana Barraza, Yvette Monreal, Sergio Peris-Mencheta, Marco de la O, Óscar Jaenada, Rick Zingale, Louis Mandylor, Jessica Madsen, Nick Wittman, Sheila Shah, Díana Bermudez, Atanas Srebrev, Aaron Cohen, Manuel Uriza, Owen Davis, Dimitri Thivaios, Genie Kim, Ricky del Castillo, Joaquín Cosio
Resumen : Acción, narcotráfico, secuestros, sangre por litros.
Para quienes son fanáticos de la saga de “Rambo”, que, a la fecha, lleva cinco ediciones, sin duda que la nueva versión de esta película, no sólo la esperan ansiosos, sino con ganas de ver algo nuevo en la historia del mítico personaje, un ex combatiente de la Guerra de Vietnam, experto en combate cuerpo a cuerpo y en guerra de guerrillas, que lucha por adaptarse a la realidad que le quedó, tras abandonar dicha masacre y tratar,entonces, sin mayores posibilidades, de acostumbrarse a una vida alejada de la tragedia.
Rambo es una obra escrita por David Morrel en 1972, llamada “First Blood” y adaptada al cine por el mismo Silvester Stallone en 1982, la cual en su tiempo recibió, en general, criticas positivas , aunque dicha adaptación se alejaba un poco del libro original, ya que en él, el personaje John Rambo muere a manos del Coronel Trautman.
Habiendo dicho esto, hay algo especial detrás de Rambo, ya que siempre me recuerda a las obras griegas de Homero. En efecto, el personaje que interpreta Silvester Stallone, sea adpata de alguna forma a las obras “La Iliada” al representar de forma actual, la guerra de Vietnam y de cómo los soldados que participaron de dicha conflagración, debieron volver a sus casas, soportando la crítica del pueblo norteamericano, por haberse tratado de una guerra muy impopular en Estados Unidos.
Las obras que siguen , es decir Rambo II , III y IV, me recuerdan a “La Odisea”, por tratarse del drama del soladado que trata de volver de la guerra y en el camino se encuentra con diversos hechos, generalmente, trágicos en su vida, hasta que, en algún momento, logra tan anhelado encuentro con su familia, como fue representado al término de la entrega de Rambo IV- Regreso al infierno-, cuando consigue retornar al rancho familiar de sus padres en Arizona.
Es curioso, pero, si usted no lo cree, hay adultos que nunca han visto las películas de “Rambo”. Y, lo digo, porque uno pensaría que se trata de una historia que resulta fascinante para muchos amantes del cine, pero no es así,al menos, para quienes prefieren las historias propias del cine arte, las historias con contenido que no sea la guerra y matanzas por doquier. Bajo ese escenario, “Rambo” les parece una película sin sentido, sólo efectos especiales y que sólo busca ganar millones con la clientela que va a las salas a ver a un Silvester Stallone, héroe perdido de una guerra y al que llaman para “hacer justicia”. Sólo, para los amantes del cine arte “Rambo”, en sus distintas versiones, no apunta más allá a lo que llamaríamos en la década de los ochenta, un “éxito de taquilla”.
No obstante, al otro lado de la vereda, centrándose en los aportes que pudiesen significar estas secuelas, al analizar las entregas de este personaje, veremos que cada una de ellas muestra una etapa en las relaciones internacionales de Estados Unidos y que cada una de ellas es, a su vez, una crítica social de dichos vínculos y de la forma cómo ese Estado ha intervenido en los sucesos del Siglo XX y XXI, en la cual este ex soldado, representa el drama humano adyacente.
Pero, después de este paréntesis, volvamos a lo nuestro, a hablar de “Rambo -Last Blood”.
Si se busca un éxito de taquilla, vale la pena preguntarse lo siguiente: ¿la era de acción de “Rambo” estará pasada de moda? Esto, porque, frente a la pantalla se observa un “Rambo”de 73 años, que lucha por rescatar a su nieta adoptiva que ha desaparecido, tras cruzar la frontera a México para ir en respuesta de su ausente padre biológico, quien la habría abandonado a ella y a su moribunda madre, muchos años antes.
Luego de ello, la tragedia se desata al ser dicha joven, víctima de las redes del narcotrafico y la trata internacional de prostitución, razón por la cual, Rambo cruza la frontera en su búsqueda y, para eso , se debe enfrentar a los carteles mas peligrosos de México.
Y, para hacerse una idea de lo que les pasó a los críticos internacionales con esta quinta versión de “Rambo”, hagamos un breve repaso. Por ejemplo, Anthony O’ Connor, de FILMINK (Australia) afirmó que esta nueva versión es “una película de acción perfectamente agradable, aunque extrañamente organizada, con un recuento de muertes decente, pero no parece el final concluyente del arco de un personaje establecido”.
Vincent Mancini, de Film Drunk dijo que “El Rambo de la era Trump es esencialmente un muro fronterizo humano que mantiene a Estados Unidos a salvo de los violadores y asesinos mexicanos. Absolutamente trastornado, una visita obligada”.
Scott Mendelson, de Forbes indicó que “Es menos una verdadera película de ‘Rambo’ y más una imitación genérica (a pequeña escala) de ‘Taken'(Busqueda Implacable) con John Rambo arrojado arbitrariamente a la mezcla”.
Cerrando la pregunta de más arriba, definitivamente, esta cinta logra su cometido, situando al personaje de Stallone en el clima político actual, que entrega una adecuada cuota de acción y sangre por doquier, unida a una buena dosis de suspenso que logra mantener cautivo al espectador, a ratos aferrado a su asiento, esperando el próximo golpe de machete de este septuagenario héroe.
CALIFICACIÓN: RECOMENDABLE, BUENA.