Sputnik
OPINIÓN

Crítica Sputnik –extraño pasajero-: el cine ruso no deja de sorprender

Por: Equipo “Cápsula Informativa”

El Reparto


Oksana Akinshina            (Tatyana klimova) 
Fedor Bondarchuk           (Semiradov)
Pyotr Fiodorov                 (Konstantin veshnyakov)
Anton Vasiliev                  (Rigel)

Año:                                        2020
País:                                        Rusia
Duración:                                113 minutos
Director:                                 Egor Abramenko
Guión:                                    Oleg Malovichko, Andrei Zolotarev
Fotografía:                              Maxim Zhukov
Música:                                   Oleg Karpachev
Género:                                  Ciencia Ficción. Horror
Distribuidor:                           BF Chile

Sobre Sputnik -extraño pasajero-

Sputnik – extraño pasajero, está ambientada en 1983, en plena Guerra Fría, cuando las potencias del norte del planeta aún se peleaban la supremacía sobre el cosmos, sin entender los eventuales peligros que ello podría acarrear para la especie humana en el evento de un contacto alienígena.

Sin entrar en un spoiler, luego de un accidente de una cápsula espacial, dos cosmonautas que regresan a la tierra, se ven enfrentados a un extraño ser que asesina a uno de ellos y que sobrevive a modo de parásito en el interior del otro.

El sobreviviente,  pyotr fiodorov, aún ignorante de esa situación por sufrir un stress postraumático debido a los hechos descritos, es sometido a diversos experimentos médicos para determinar la naturaleza  de la especie visitante que reside en su interior, desconociendo aquél ese aspecto.

El tiempo apremia y los efectos negativos en el protagonista que, ahora, es un héroe de la nación soviet,  son evidentes y representan un peligro para él y quienes le rodean.

Más de la historia

Para expulsar al visitante de su cuerpo, convocan a una psiquíatra especialista, representada por oksana akinshina, quien deberá desplegar sus mejores talentos para salvar la vida del astronauta, pero al mismo tiempo, por órdenes de los jerarquía del partido y el ejército, deberá  resguardar al “extraño visitante” ya que , la verdadera pretensión de los lideres allí desplegados,  es transformar a esa especie en una arma.

Ya muy avanzada la película, el clímax final nos revela algunas escalofriantes escenas que entregan imágenes bastante sorprendente y que no era anticipable como en otros filmes de la misma categoría. 

El filme se desarrolla en dos partes:

La primera de ellas, es un thriller psicológico que nos permite vislumbrar algunas de las  técnicas secretas de control utilizadas por las frías autoridades del gigante militar soviético en la Guerra Fría, lo que, al mismo tiempo, permite desarrollar a los personajes por medio de algunos flashback al pasado de ellos.

Y la segunda parte, es acción pura con ciertos retoques propios del cine ruso bastante bien logrados, que permiten a ratos breves espacios de tensión entre balas.

La película tiene un buen ritmo, a veces un poco lento, pero, en general, es entretenida y te mantiene pendiente de cada escena.

Se ha criticado en algunos medios que este largometraje es una especie copia de películas hollywoodenses, como Alien (1979) y Life (2017), pero lo cierto es que, a pesar de algunas similitudes, permite explorar como el cine ruso se encuentra en la búsqueda de autonomía cinematográfica del resto del mundo y lo consigue a través de esta cinta. 

Desde nuestro punto de vista, es una película entretenida y satisface las expectativas de los amantes de este tipo de narrativas.