Exclusivo: Ex gendarme estafó en más de $700 millones a 80 familias por supuesta venta de parcelas

Por: Daisy Castillo Triviños.

Su nombre: Gustavo Contreras Carrasco, ex gendarme, convertido, ahora, en empresario inmobiliario. Sin embargo, el sujeto no es lo que dice ser. ¿Por qué? A la cabeza de América Inmobiliaria SPA, el trabajo consistía en captar clientes y prometerles la venta de parcelas. Así, fueron varios lo que cayeron en la estafa de este ex funcionario de Gendarmería que, de seguro, con unos  poco comunes y llamativos ojos azules, a más de una víctima atrapó en su trampa.

A un par de minutos de la Ruta 5 Sur, justo en medios de los hermosos paisajes del Maule, un proyecto de parcelaciones atrajo la atracción de la gente y fueron varias las personas que, anticipadamente, pagaron por la reserva. Un total de 80 familias, dieron un pie de $7 millones, algunas, incluso, más que ese monto. Y hasta para mantenerse cerca, algunos clientes compraron cuatro parcelas separadas, pero cerca la una de la otra.

Mariana Leonor, una de las víctimas, relata que Gustavo Contreras, el ex gendarme tenía todo un operativo de ventas. “Con una oficina de ventas, secretaria. Y me dijo que era uno de los nietos de los dueños de este fundo y no es nieto”.

La oferta de parcelas se extendería más allá de Longaví, incluso, personas de la Región Metropolitana, “pisaron el palito” y fueron estafados. Varios de los afectados señalan que se esteraron de la oferta por publicaciones difundidas, a través de internet. Incluso, viajaron desde Santiago hasta Longaví. En este sentido, Luis Peñoloza, comenta que “me gustó una que quedaba al frente de una que había comprado un familiar”.

Hay que señalar que, mientras en paralelo se recibían los $7 millones por concepto de reserva, se tramitaban las autorizaciones para convertir el fundo en parcelas, algo muy similar a lo que se llama “compra en verde”.

Otro denunciante, Manuel Arredondo, señala que “ellos venían el fin de semana a mostrar todos terrenos y, por lo mismo, llegaba mucha gente”.

¿Cómo operaba la estafa?

Una vez que los interesados entregaban el pie de $7 millones por la reserva, tenían que esperar seis meses para que estuvieran terminados los trabajos y, luego, podrían transformarse en propietarios, pero lo plazos comenzarse a alargarse. Los interesados escuchaban de parte del dueño de la inmobiliaria que, en un margen de dos semanas, estaría listo el Rol. ¡De eso, nada!

Tampoco Gustavo Contreras se dio el tiempo de contactar, de llamar por teléfono a los interesados y que le habían entregado dinero, para explicarles cuál era la razón o las razones de la demora en la entrega de los terrenos. Álvaro Arzola, otra de las víctimas, afirma que “no pescó más a la gente, no contestaba el teléfono, la gente le enviaba whatssap, no respondía”.

Después de todo eso, las víctimas advierten que, en algún minuto Contreras reconoció que no era el dueño de los terrenos y les propuso, entonces, que formaran una sociedad con él.

En concreto, éstas fueron las palabras del ex gendarme hacia los afectados: “Dejar todo bien amarrado y armado con cada uno de los clientes, respetando a cada uno de ustedes y después avanzar con los que quieran comprar su parece acá en San Benito”. Y la gente, en medio de una reunión que sostuvieron, encaraban al ex gendarme en la cara, gritándole: “¿Dónde están mis $7 millones?”, otros le decían “¿dónde están mis $14 millones, se haga el “weón”?, “¿dónde está mi plata?”, “¿te la gastaste”?

Y preste atención, usted lector, porque Gustavo Contreras pareciera que no tiene ningún interés en salirse del negocio inmobiliario, porque su inmobiliaria publica en Redes Sociales que está vendiendo otro proyecto “Aires de Arquén” y que incluye viviendas construidas.

“Cápsula Informativa” intentó ponerse en contacto con el denunciado, pero nada, no figura en ningún domicilio, tampoco responde el celular ni mensajes por whatssap.

La Fiscalía del Maule lo está buscando. El fiscal de Linares, Alexie Crisóstomo señala que “se trata de varias denuncias y querellas que fueron presentadas en un primer momento en forma independiente, luego, al percatarnos que se trataba de un mismo modo de actuar y de un mismo imputado, se procedió a agrupar todas estas denuncias y querellas en una sola causa”.

Un ex gendarme es el cabecilla de una estafa piramidal. ¡Otra vez, engañando con la fórmula del “Cuento del Tío”.