La importancia de la Ley de Migraciones ante la actual crisis
Por: César Cifuentes, presidente regional del PRI de Magallanes
La crisis migratoria en Norte de Chile es una situación humanitaria crítica que se está viviendo, ante el masivo cruce de las fronteras de personas que llegan a instalarse a Chile. El pasado 31 de enero, en un hecho inédito, un amplio grupo de camioneros obstruyó el acceso a la capital de la Región de Tarapacá, en protesta por el aumento de la delincuencia y de la inseguridad social que afecta a la zona y la crisis migratoria. El aeropuerto de Iquique debió cancelar los vuelos, frente a la movilización ciudadana.
Nadie podría negar que se trata de una crisis que se arrastra por años, desde la administración de Michelle Bachelet y que ha ido creciendo con el paso de los años, donde cada vez más migrantes llegan al país, cada vez más indocumentados.
La gente en la zona Norte del país se siente vulnerable ante la delincuencia y la violencia que está ocurriendo. Según datos de la Fiscalía de Tarapacá, los homicidios aumentaron 183% en 2021 en la Región, el tráfico de drogas 42%, el tráfico de migrantes 501%, y los robos con violencia e intimidación 18%.
El alcalde de Iquique, Mauricio Soria, ha señalado en los medios de prensa, de manera textual que ‘entra y sale quien quiere. Eso no puede ser (…) No hay una política clara sobre qué se va a hacer con este descontrol total en la frontera’.
El desafío que tenemos como país, es asumir el tema de la migración y hacerse cargo. Hay que recordar que migraciones dejó de ser parte de las delegaciones presidenciales y funciona como un servicio completamente independiente. Su importancia radica, entonces, en el funcionamiento de este Servicio de Migraciones que trabaje con criterios de política-país y de cómo el nuevo Gobierno aborda la implementación de esta Ley y el funcionamiento de este organismo.
Es necesario generar la ‘legalidad’ de los migrantes, de eso, no hay duda. Para que usted dimensione lo que está pasando, un dato de referencia: en Magallanes, hablamos de más de 10 mil migran-tes y se calcula que el 50% de no está legalizado.
Hay más estadísticas que dan cuenta de cómo el proceso de migración en Chile, va creciendo exponencialmente. Por ejemplo, de tener unos 305.000 (1,8% de la población total) de habitantes extranjeros en 2010, llegó a casi 1,5 millones (7,5% de la población) en 2020, de acuerdo con la organización Servicio Jesuita a migran-tes (SJM).
Y una parte importante de ese incremento corresponde a la comunidad de venezolanos que de 8.000 personas en 2012 alcanzó las 500.000 en 2020, convirtiéndose en el mayor grupo de extranjeros residentes en Chile.