Se agrava el conflicto en Ucrania: Los caminos de Putin, la guerra o la rendición
Por: Equipo Cápsula Informativa
“Vamos a luchar hasta el final y esta guerra la vamos a ganar sí o sí”, esa es la clara declaración que dio a Canal 13, un ucraniano que decidió quedarse en su país para defenderlo del ataque de Rusia.
Las negociaciones no han dado fruto y se mantienen los combates, causando muertes y la destrucción de edificios residenciales, iglesias y hospitales.
En contraste con esa cruda realidad que se asemeja al infierno, están las imágenes de las donaciones de peluches para entregarles a los miles de niños que están en medio de la Guerra y que junto a sus familias (la mayoría madres) y personas de la tercera edad están tratando de salir de Ucrania, rumbo a Polonia, o a algún otro país cercano.
La estrategia del Presidente de Rusia se está complejizando cada vez más, al punto de que no está dando más alternativas que mantener la guerra o rendirse por parte de Ucrania.
Recordemos que durante el fin de semana, el Presidente ruso reiteró que sus objetivos son defender a las comunidades de habla rusa mediante la “desmilitarización y desnazificación” del país para que sea neutral y advirtió que cualquier intento de imponer una zona de exclusión aérea que interfiera con sus intereses equivaldría a entrar en el conflicto.
Por su parte, el presidente ucraniano, Volódimir Zelenski, hizo una “petición desesperada” para que el este de Europa entregue aviones fabricados en Rusia a su país, durante una videollamada el sábado con senadores estadounidenses, dijo el líder de la mayoría en la cámara, Chuck Schumer.
Más sanciones contra Rusia
La presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, dice que ese órgano sopesa un proyecto de ley para aislar aún más a Rusia de la economía global, incluyendo prohibir la importación de su petróleo y productos energéticos a Estados Unidos.
En una carta a los demócratas publicada el domingo por la noche, Pelosi señaló que el proyecto de ley que está bajo consideración también rechazaría las relaciones comerciales normales con Rusia y Bielorrusia e iniciaría el proceso de denegarle a Moscú el acceso a la Organización Mundial de Comercio.