Sueldos públicos en la cuerda floja: Trabajadores profesionales universitarios de la salud califican el reajuste de 3,4% de indigno e ineficiente

El Gobierno y la Mesa del Sector Público sellaron el acuerdo de reajuste salarial para 2026. El pacto establece un incremento general del 3,4%.

La discusión no ha estado exenta de tensión y críticas. Aunque diez organizaciones firmaron, seis gremios importantes —incluyendo la ANEF (funcionarios fiscales), el Colegio de Profesores y la Fenats (salud)— rechazaron la propuesta.

Gonzalo Calisto Alfaro, director de movilizaciones de la Federación Democrática de Profesionales Universitarios de la Salud (Fedeprus) Valparaíso – San Antonio, señala que “esto no se debería llamar reajuste, porque reajuste no hubo, sino una pérdida del poder adquisitivo desde enero a junio, porque el IPC acumulado que llega al 3,4%, el gobierno lo va a entregar reajustando sólo el valor de aquello, en 2% en diciembre y 1.4% en junio. El reajuste del 3,4% sólo empata con la inflación proyectada. En palabras sencillas esto quiere decir que, finalmente, nuestro dinero pierde valor en los próximos seis meses y que no hay un alza de los sueldos de ninguno de los trabajadores del servicio público”.

El dirigente, quien también es director de la CUT Provincial Valparaíso advierte que “este reajuste es ineficiente e indigno para los trabajadores del servicio público. Rescatamos, al menos, algunos acuerdos, en general, los no económicos dentro del protocolo y que hablan de un avance en lo que se podría lograr, porque no está nada sentado, firmado ni estipulado en ninguna ley. Todo lo contrario, son proyectos y buenas intenciones que se plasman en este protocolo. En la parte fundamental que es la retribución económica y la no pérdida del poder adquisitivo, lamentablemente fallamos en esta ocasión”.

La crítica a la falta de presión de la Mesa del Sector Público

Gonzalo Calisto Alfaro hace una autocrítica al desempeño de la Mesa del Sector Público. En tal sentido manifiesta que “esta es una negociación fallida por parte de la mesa del sector público, porque no se realizaron las presiones eficientes, las movilizaciones suficientes para que esto pudiese resolverse. El mensaje de la CUT nacional iba de la mano con las elecciones presidenciales, en ese ámbito y, en esa línea, se perdió mucho tiempo esperanzados de poder atacar el avance de una opción política distinta en la cual, se veían, en palabras de la CUT, amenazas para el sector público, pero eso precisamente generó el retraso de las acciones de movilización”.

Añade que “también la crítica de las organizaciones afiliadas a la CUT fue que la mesa de trabajo se instauró muy tarde este año, a sabiendas y con las experiencias previas, de que siempre pasa lo mismo y que esta mesa debiera ser un continuo de trabajo, durante todo el año”.

El director de la CUT Provincial Valparaíso hace hincapié en que “en las informaciones que tenemos nosotros de la misma CUT es que esta mesa empezó a funcionar en agosto de 2025. Las razones y las excusas son varias, en parte de que este directorio 2025 pasó por elecciones, que costó que el nuevo directorio se asentarse dentro de la actividad y que, por lo mismo se dio la demora. En mi opinión personal, esto es una llamada de atención: las personas que se sentaron en los puestos del directorio, tienen experiencia previa, manejan esta temática, los plazos y los tiempos. Por lo tanto, no se explica aún por qué se actuó de esta manera y, al final, lamentablemente, esto quedará en el aprendizaje y para el próximo año, en términos de hacer las cosas de mejor forma, porque se deja a los trabajadores en una posición de estancamiento frente al alza del costo de la vida”.