Escapando como ratas…

Nadie podría negar que la situación en Ucrania no es sólo compleja, sino también dolorosa, porque el ataque ruso propinó un golpe a una población que no está preparada ni económica ni militarmente para hacer frente a las acciones impulsadas por Vladimir Putin, provocando una guerra que, hasta hace algunos días, pocos creían que ocurriría.

Las escenas de las que hemos sido testigos desde la semana pasada, son desgarradoras y evidencian la crisis por la que se está atravesando: por ejemplo, quién podrá olvidar la imagen de un joven padre dándole un beso de despedida a su hija, porque se quedará en Kiev para defender a su país, para defender a su querido país. Un espíritu patriótico gigantesco y que no ha logrado derrumbar la estrategia militar de Rusia.

También en Chile, hemos visto a ucranianos residentes que no se han quedado de brazos cruzados, sino que han salido a la calle, han llegado hasta la embajada de Rusia, cargados de banderas de su país y de carteles en los que se lee: “No war” o “Putin detén la agresión” y otros tantos que están buscando la forma de volver a Ucrania a luchar.

Pero, ante la mirada de miles que están dando la pelea por defender a su país, llama la atención la actitud de los chilenos residentes en Kiev y en otras partes de Ucrania.

Y hay un refrán que, precisamente, grafica su comportamiento: “Las ratas huyen del barco que se hunde”. Muchos de ellos, se han radicado hace años en estos países, han aprovechado los beneficios del modelo europeo, pero, ahora, se comportan como traidores y desleales y escapan por sus fronteras.

Tal vez, usted lector podrá decir que tienen derecho a salvarse, que ésta no es su guerra.

¡No! Ésta sí es su guerra, ya que si haces tu vida en un país, formas parte de esa sociedad, tienes familia y formas una red de apoyo social, lo mínimo que debes hacer es proteger tu país y eso es lo reprochable, ya que no hablamos de turistas, sino de residentes de un país, que han sido acogidos y que se han ido de Chile porque su patria de origen no le dio las opciones para desarrollarse ¿Qué les dirán a sus hijos el día de mañana cuando ellos pregunten, ¿Padre, por qué escapaste de mi país y no luchaste?

A estos chilenos, no se les pide que sean combatientes de primera línea porque no son soldados, se comprende, pero perfectamente podrían haber ayudado en la retaguardia repartiendo comida o suministrando municiones al frente, pero en una actitud despreciable, han desertado dejando atrás al país que los recibió. Hay ciertos niveles de sobrevivencia que no son aceptables. A veces es mejor morir luchando que sobrevivir de rodillas.

Esa actitud chilena, y en general latinoamericana, contrasta con la decisión de mujeres civiles de Ucrania que han tomado las armas para defender a los suyos, defender a su país. Estas mujeres, han aprendido en un par de minutos a usar un arma. Nada de cobardes, nada de ratas escapando, todo lo contrario. Lo mismo con jóvenes que alcanzan recién los 18 años y adultos mayores que incluso vivieron la segunda guerra mundial, que se han presentado a los cantones de reclutamiento ucranianos para combatir por su patria.

Otro aspecto que no se puede obviar es el ineficiente rol de las autoridades diplomáticas de Chile en Rusia que han demostrado un nivel de descoordinación abrumante, con falta de apoyo real hacia esos chilenos que está intentando salir al oriente de Ucrania o dejar derechamente el país. Incluso, los mismos chilenos han señalado a los medios de comunicación que no han recibido apoyo, no han tenido asistencia, nula orientación de qué hacer, dónde ir. En palabras simples: las “autoridades” chilenas allá, especialmente han nombrado la delegación diplomática de Polonia, les han dicho a sus compatriotas ¡arréglenselas solitos!

Y a propósito de chilenos, hay otra que se ha mantenido con un pronunciamiento más bien lejano y frío:  Michelle Bachelet. En esta jornada, la ex Mandataria apareció haciendo una suerte de recuento sobre las muertes en Ucrania y que, además, difieren de la  información entregada por dicho país, pero sin animo de condenar a su Compañero Putin. ¡Inaceptable!

Según Bachelet, 102 muertos y 304 heridos civiles se han registrado desde que comenzó la “operación militar especial” rusa. Las autoridades ucranianas, hablan de 352 bajas hasta el momento. Las violaciones a los derechos humanos se han visto desde el primer día. Cómo olvidar sólo una de las imágenes que nos está dejando la guerra , como aquel momento en que un blindado arrolló a un vehículo civil simplemente porque pasaba por ahí…, pero no , para Bachelet no pasa nada…